¿Qué son los créditos o bonos de carbono?

Un crédito o bono de carbono es un instrumento financiero transable que representa una tonelada de CO2 equivalente absorbida o evitada en la atmósfera. Estos créditos son generados por diferentes tipos de proyectos sostenibles que absorben carbono o evitan su emisión a la atmósfera. Una vez generados y certificados por un tercero bajo por ejemplo, el estándar Americano Verra o el Suizo Gold Standard, estos créditos pueden ser vendidos a empresas o personas para la compensación de sus propias emisiones.


Los diferentes tipos de

 créditos de carbono

Existen diferentes tipos de créditos de carbono, dependiendo del proyecto que los genera.

Energía renovable: Estos proyectos construyen centrales solares, eólicas o hidroeléctricas para la producción de electricidad cero carbono, reduciendo nuestra dependencia en combustibles fósiles y las emisiones de carbono asociadas a la generación de electricidad.

Floresta y conservación: Estos proyectos incluyen la reforestación (plantación de arboles en un area deforestado), forestación (plantación de arboles en un area que previamente no tenia ningún), y proyectos de conservación de ecosistemas (impidiendo la deforestación y preservando la biodiversidad). Estos proyectos a veces se les llaman de soluciones basadas en la naturaleza o NBS por sus siglas en Inglés.

Waste-to-energy: En los proyectos de waste to energy (transformación de residuos en energía o biogas), los desarrolladores recogen los residuos de vertederos, comunidades o actividades agrícolas y capturan el metano que producen para generar electricidad. De esta forma, reducen la cantidad de metano emitido a la atmósfera y generan electricidad barata y sostenible.

Otros proyectos pueden incluir iniciativas de eficiencia energética que reducen la necesidad para los combustibles fósiles o proyectos comunitarios que introducen nuevas maneras de cocinar o de generar electricidad, reduciendo las emisiones de carbono y evitando la deforestación local.